Aunque el censo actual del Ayuntamiento de Benito Juárez marca 500 iglesias de diferentes denominaciones, las cuales podían regresar a sus actividades religiosas a partir de la semana pasada, no todas optaron por hacerlo, de hecho respecto a la católica solo el 70% lo hizo, bajo las más estrictas normas de higiene y recomendaciones para los feligreses informó el obispo de la diócesis Cancún–Chetumal, Pedro Pablo Elizondo Cárdenas.
Después de reanudar las misas dominicales en la Catedral de Cancún a un 30% de su capacidad, el religioso refirió que se siguen las normas más estrictas para que no haya aglomeraciones entre ellas cancelar algunas filas de bancas y señaléticas para el acceso y salida, así como que la comunión se entrega en las manos, y se cancelaron las bendiciones y fotografías al final de la misa.
Las confesiones se hacen al aire libre y existe una pantalla de acrílico que divide al sacerdote del creyente; por su parte, Elizondo Cárdenas señaló que no han tenido problemas con cumplir con el 30% de afluencia pues los lugares son ocupados por orden de ingreso y una vez se llega al límite permitido ya no se permite el acceso de nadie más.
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