Dos años y medio después del violento ataque a las instalaciones de la Vicefiscalía de Justicia en Cancún, que dejó saldo de varios muertos y desató la violencia en la zona norte de la entidad, la actividad tiende a normalizarse al abrirse al público, las áreas remodeladas.
En un comunicado, la Fiscalía General del Estado (FGE), informa que concluyó la primera etapa de remodelación de sus instalaciones de la avenida Xcaret esquina Kabah, en la súper manzana 21.
En este lugar se atiende a un promedio diario de más de 350 usuarios
Precisó que con estas instalaciones se cumple con el programa de trabajo del fiscal Óscar Montes de Oca Rosales, para brindar a la ciudadanía un espacio confortable, amplio y digno y que este 1 de julio entró en operaciones.
De acuerdo con la información que se proporcionó, en este lugar se atiende a un promedio diario de más de 350 usuarios que asisten a diversos trámites en las 24 horas del día en distintos horarios.
Áreas remodeladas de la Vicefiscalía
Se indicó que entre las áreas remodeladas se encuentran las oficinas de la Vicefiscalía General, el filtro, la recepción, sala de espera, la de trámite de antecedentes no penales, de atención Temprana, la Unidad de Atención a Personas Desaparecidas, de Justicia Alternativa, de Investigación y Acusación, la Unidad de Robos de Vehículos, de Participación Ciudadana y Derechos Humanos
También te puede interesar: Recibe la Fiscalía el Protocolo de Actuación contra Violencia Política
La Fiscalía dio a conocer que los trabajos iniciaron en el mes de febrero y hasta ésta fecha se trabajó noche y día para que a la brevedad se terminaran las adecuaciones.
Remodelación de una segunda etapa
La FGE también anunció que iniciará la remodelación de una segunda etapa en breve, de cinco contempladas para modernizar las instalaciones y dotar a los servidores públicos de espacios dignos para la oportuna atención a la ciudadanía.
Se trata de la primera ocasión desde enero del 2017, que se tiene una operación de manera normal en el inmueble.
El 17 de enero de ese año, un comando armado atacó las instalaciones dejando saldo de 5 presuntos agresores detenidos y 4 muertos, entre ellos un policía ministerial.