A un año de la muerte de Edith González, Carmen Salinas, quien conviviera con la actriz en la obra Aventurera, la recuerda con cariño y asegura que siempre fue una mujer muy discreta con su vida privada. A 12 meses de su partida, Salinas narra cómo se entero de la relación de González con el secretario de Gobernación en aquel entonces, Santiago Creel.
“Era muy discreta, yo voy a cometer una indiscreción ahorita, ‘El chato’ (asistente personal de Carmen Salinas) tenia un amigo que trabajaba en Gobernación, le decía ‘hoy viene la aventurera’ porque le traen todos los platillos que a ella le gustan… le encanta la comida japonesa. Nos piden que apaguemos todas las cámaras para que nadie vea que viene ella y que esta aquí con el jefe..’, todos ya lo sabíamos, nomas que no sabíamos que se iba a embarazar y yo creo que fue ahí donde se gestó la historia de Constanza”
Edith González embarazada de Santiago Creel
Incluso, la también productora recuerda cuando Edith le dio la noticia de su embarazo.
“Y me acuerdo cuando nos platica Edith, ‘que cree Carmelita.. que estoy esperando..’ y dije quién es el papa..? ‘Ya lo llegaran a saber, ya lo llegaran, sin comentarios…”
Por otro lado, la comediante reconoció que la también bailarina no era la primera opción para protagonizar Aventurera, obra que le dio un gran impulso y éxito a su carrera.
“Me acuerdo que la primera que iba hacer Aventurera fue Itatí Cantoral, de pronto me habla Itatí y me dice ‘madre no voy a poder ir.. ‘… y empezamos a barajar nombres de ¿quién nos hacia el personaje de Aventurera,? cuando viene lo del campeonato, el partido de Neza-Guadalajara y Edith me pide que la invite y cuando estamos en el restaurante comiendo, en un lapso de la comida, ponen música tropical y se para y se pone a bailar, me le quedo viendo.. y le digo ‘Chato, Edith es Aventurera”.
Finalmente Salinas reconoce que su partida aun le causa gran dolor y no se explica el por qué de su muerte.
“No concibo que ya este ahí enterrada, una mujer tan buena, tan hermosa, este enterrada ahí no, no lo concibo, no lo acepto”