Antes de que el año concluya, Rusia lanzó este viernes un mortal bombardeo con misiles a zonas de población civil en Ucrania, dejando una estela de destrucción y por lo menos 30 personas muertas. Sería el mayor ataque desde que inició la guerra.
En total, las fuerzas armadas rusas dispararon durante la noche más de 150 misiles de crucero y docenas de drones tipo Shahed contra objetivos ucranianos, la mayoría de ellos en zonas pobladas.
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Aunque muchos de estos misiles y drones fueron interceptados por las fuerzas aéreas ucranianas, varios de ellos lograron hacer blanco en zona pobladas de Leópolis (oeste) y Járkov (nordeste) dejando decenas de muertos y al menos 160 heridos.
En un barrio del norte de la capital ucrania, un hangar de 3 mil metros cuadrados estaba en llamas y allí se produjeron «numerosos heridos», según el jefe de la administración militar de la capital, Serguéi Popko.
De acuerdo con el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, siete civiles «están actualmente ingresadas en un hospital» y quedó dañada una estación de metro utilizada como refugio antiaéreo. Los bombardeos también afectaron las localidades de Dnipró (este) y Odesa (sur), según las autoridades locales.
Por su parte, el Ministerio de Salud informó que una maternidad «quedó muy dañada» en Dnipró, donde el alcalde informó de muertos y heridos. En Odesa, un inmueble se incendió después de que impactaran en él los restos de un dron abatido.
Los misiles incluso, invadieron espacio aéreo de Polonia, país que forma parte de la OTAN, y el cual denunció que un misil ruso entró y salió de su espacio aéreo en dirección al territorio ucranio.
«No habíamos visto tanto rojo en nuestras pantallas desde hacía mucho tiempo», reconoció Yuri Ignat, portavoz de la Fuerza Aérea ucraniana, quien afirmó que se trata «del ataque con misiles más masivo» con la excepción de los que se produjeron los primeros días tras el inicio de la invasión rusa, el 24 de febrero de 2022.
Según el último balance de víctimas, comunicado por el ministro ucranio del Interior, Igor Klymenko, al menos 30 personas murieron y mas de 160 resultaron heridas. Según el Estado Mayor ucranio, Rusia disparó cerca de 160 artefactos, incluido misiles de crucero y drones Shahed. La defensa antiaérea logró interceptar 88 misiles y 27 drones.
Con la indignación que da el conocer las muertes de numerosos civiles en su territorio, el presidente ucranio, Volodymir Zelensky, aseguró en la red social X que «Rusia utilizó todo tipo de armas de su arsenal».
Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso se limitó a comunicar que «habían alcanzado todos sus objetivos» e indicó que hubo «un bombardeo de envergadura» entre el 23 y el 29 de diciembre contra infraestructuras militares, depósitos de municiones y bases de soldados ucranio y mercenarios extranjeros.
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Con Información de Agencias
