En medio de acusaciones mutuas de violaciones a las condiciones de paz tanto de Ucrania como de Rusia, la guerra está apenas a una pequeña chispa de distancia según consideran los propios funcionarios de estos países, en un escenario en que los Estados Unidos aseguran que la invasión ya ha iniciado.
Tras el reconocimiento de Rusia a la independencia de las regiones separatistas de Luhansk y Donetsk, y el envío de tropas rusas a estos lugares «para garantizar la paz», el gobierno ucraniano ha decretado el estado de emergencia y entrena a su población civil para el ataque ruso.
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Y es que, el envío de estas tropas por parte de Rusia a estas dos regiones que son en el papel territorio de Ucrania, es visto por el gobierno de Estados Unidos y sus aliados de la OTAN como el inicio ya de la invasión armada.
No es para menos, pues el gobierno de Vladimir Putin, ha ido acumulado paulatinamente tropas en las fronteras de Ucrania, aprovechando el pretexto del apoyo a las regiones separatistas, preparándose para asestar el golpe definitivo.
Y el gobierno ruso, parece n o negar sus intenciones de atacar a su vecino Ucrania, pues el Embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia, advirtió ante la Asamblea General del organismo mundial que “nadie tiene intenciones de actuar con suavidad contra los violadores” de la paz en esas áreas.
Argumentando que Ucrania está perpetrando un “genocidio flagrante” en las regiones del este de Ucrania que Rusia ha reconocido como independientes, mientras tanto, acumula cada vez mas tropas a las puertas de ese país.
Ante este escenario de inminente conflicto, los legisladores de Ucrania aprobaron el miércoles un decreto que autoriza el estado de emergencia a nivel nacional, que permite a las autoridades imponer restricciones de movimiento, bloquear mítines y prohibir partidos y organizaciones políticas “en interés de la seguridad nacional y el orden público”.
También prohíbe el citado decreto, los “materiales informativos que podrían desestabilizar la situación en el país” y otorga al gobierno el derecho de imponer toques de queda y realizar controles.
Esto se suma a otros indicadores que parecen vaticinar que la guerra esta a pocas horas de iniciar, por ejemplo, el inicio de la evacuación del personal ruso de todas sus sedes diplomáticas en Ucrania.
O los incesantes ciber taques a la infraestructura informatica de Ucrania como sitios web del Gobierno y de bancos, muchos de los cuales quedaron fuera de servicio desde el miércoles, situación de la que Estados Unidos responsabiliza al servicio de seguridad ruso GRU.
Pues se recuerda que los hackeos fueron una herramienta muy usada por Rusia contra Ucrania desde 2014, cuando Rusia se anexó el territorio ucraniano de Crimea y unos hackers intentaron frustrar la realización de elecciones.
Previendo el inicio de las hostilidades, el Pentágono anunció el martes el despliegue de 800 soldados estadounidenses más en los países bálticos —Estonia, Letonia y Lituania— para reforzar el flanco este de la OTAN.
Los 800 efectivos forman parte de un batallón de infantería que se encuentra actualmente en Italia, y que será desplegado en la región báltica. Además, EU trasladará desde Alemania veinte helicópteros de combate AH-64 a Estonia, Letonia y Lituania.
Además, el Pentágono enviará también a “varias localizaciones” del flanco este de la OTAN ocho cazabombarderos F-35, que se hallan en Alemania; y ha dado luz verde a la transferencia de doce helicópteros AH-64 de Grecia a Polonia.
Estados Unidos ha señalado que estos movimientos de tropas y de equipamiento son “temporales”, y se suman a los más de 90 mil soldados que tiene desplegados en Europa bajo mandatos rotatorios y permanentes.
Guerra en Ucrania a una chispa de distancia
Con Información de Sinembargo.com
