Madrid pide apoyo del ejército para controlar la pandemia.
Las autoridades de la Comunidad de Madrid pidieron este miércoles al gobierno de Pedro Sánchez apoyo logístico “urgente” del Ejército para la realización de test de coronavirus y labores de desinfección ante los crecientes contagios registrados.
El gobierno regional de Madrid, anunció su vocero, Ignacio Aguado, solicitó también 222 efectivos policiales y la contratación de 300 médicos de fuera de la Unión Europea (UE).
Las labores de desinfección se realizarán en las 37 zonas que, desde el pasado lunes, tienen la movilidad restringida a causa del aumento de contagios. Los agentes policiales son necesarios para las tareas de inspección en estas zonas.
El gobierno regional de Madrid quiere que el ejecutivo de Sánchez realice “una reforma exprés de la normativa vigente para incorporar a los 300 médicos extracomunitarios que estuvieron trabajando en la primera ola de coronavirus, y que ahora no podemos contratar” debido a “restricciones estatales”.
Madrid pide apoyo del ejército para controlar la pandemia.
Para el próximo lunes se prevé la ampliación del número de zonas con la movilidad restringida en Madrid en las que se superan los 1.000 contagios por cada 100.000 habitantes.
De acuerdo al diario El Mundo, ya existen varios grandes centros médicos en la capital de España donde las unidades de cuidados intensivos (UCI) están por sobre el 100% de su capacidad, como consecuencia de los aumentos diarios de casos graves de coronavirus.
Madrid pide apoyo del ejército para controlar la pandemia
La situación se replica en todo España donde, desde mediados de agosto, creció un 161% la ocupación de camas en terapia intensiva.
Pese a que Madrid es actualmente la región de España y Europa con mayor incidencia de coronavirus, el Gobierno regional decidió realizar confinamientos selectivos en las zonas con mayor cantidad de contagios.
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No obstante, la medida llegó cargada de polémica al afectar sólo a los barrios en los que se concentran trabajadores del sector servicios, sanitarios, el comercio o la industria, que son los más expuestos al Covid-19.
Los vecinos protestaron al anunciarse la medida y volverán a hacerlo este fin de semana porque consideran que el confinamiento es “clasista” o “segregacionista”, y resultado de una ineptitud del Gobierno regional, que no actúo a tiempo para frenar el avance de la pandemia.
