Tras el fracaso de las fuerzas militares de Rusia para “arrasar” a Ucrania y deponer al actual gobierno, que ha empantanado al Kremlin en una guerra que cumplió ya mas de medio año y los confinó a zonas ocupadas en su primer avance, el ejército al mando de Volodímir Zelenski ha lanzado una ofensiva hacia la ciudad sureña capturada de Jersón.
Ahora es Ucrania quien ha tomado la iniciativa de los ataques, lanzando esta gran ofensiva de la cual sin embargo se ignora si en realidad, marca el comienzo de un intento largamente esperado de recuperar grandes porciones de territorio perdido al comienzo de la invasión de Rusia.
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Lo cierto es, que tras el repliegue de las tropas rusas que intentaban tomar Kiev, la capital de Ucrania, y posteriormente también el abandono de la Isla Serpiente (Zmiinyi en ucraniano) a finales de junio, el ejercito ucraniano se ha fortalecido.
A lo cual han contribuido los millonarios apoyos en armamento que occidente (principalmente Estados Unidos) han prodigado a Ucrania, armas que les han permitido asestar duros golpes a las fuerzas armadas rusas.
Como el hundimiento a mediados de abril del buque insignia de la flota del Mar Negro, el Moskva, que fue mandado a pique con tan solo dos misiles “Neptuno”, lo que Rusia quiso enmascarar como un accidente.
O más recientemente, apenas a mediado de agosto, el bombardeo del aeródromo militar Saki, en las cercanías de la localidad de Novofiódorofka, tras las lineas rusas, que lo destruyó prácticamente por completo.
Aunque una vez más, el Kremlin alegó de inmediato que se había tratado de explosiones “accidentales”, que se sumarían a numerosos “accidentes” más en territorio ocupado por Rusia, e incluso en el mismo territorio ruso.
De momento, no se sabe si esta nueva embestida a gran escala de Ucrania, es la que los funcionarios en Kiev han estado prometiendo durante meses una campaña de este tipo, mientras utilizan los sistemas de cohetes de largo alcance de EU para degradar las líneas de suministro y las comunicaciones rusas en preparación.
Pero el presidente Volodímir Zelenski, mediante un video compartido el lunes por la noche, volvió a comprometerse a expulsar a las fuerzas rusas de todo el territorio ucraniano, incluidas Crimea y áreas de la región oriental de Donbas perdidas en 2014.
Sin embargo, también evitó comentar los detalles de las operaciones “¿Alguien quiere saber cuáles son nuestros planes? No escuchará detalles de ninguna persona verdaderamente responsable. Porque esto es una guerra”, dijo Zelenskiy. “Pero los ocupantes deben saber: los expulsaremos a la frontera” sentenció.
Zelenski ha dicho a sus aliados que está ansioso por lograr un progreso sustancial antes del invierno, según personas familiarizadas con las discusiones. Sin embargo, algunos funcionarios militares y de defensa en su administración son cautelosos acerca de ir demasiado duro y rápido, por temor a las repercusiones si el impulso no es suficiente.
Mykhailo Podolyak, asesor del jefe de gabinete de Zelenski dijo que “El presidente estableció una estrategia absolutamente clara” destinada a expulsar a las tropas rusas de todo el territorio ucraniano Pero agregó que “las decisiones sobre actos operativos y tácticos concretos las toman únicamente los militares, en coordinación con el presidente”.
Incluso, el propio Ministerio de Defensa de Rusia confirmó un aumento en los combates, pero como siempre, minimizó los ataque diciendo que la operación en las regiones del sur de Jersón y Mykolayiv había “fracasado miserablemente”.
Y la dependencia militar fue mas allá al señalar que Ucrania ha perdido en esta ofensiva 560 soldados, así como muchos tanques y aviones, afirmaciones que por supuesto, son imposibles de verificar en estos momentos, lo que las hace aparecer como un acto de propaganda.
Por su parte, una unidad militar ucraniana dijo en su página de Facebook que había visto a soldados rusos en retirada. Oleksiy Arestovych, asesor militar de la administración de Zelenski, afirmó que las tropas ucranianas habían cruzado en retirada las líneas iniciales de defensa rusa cerca de Jersón, la primera gran ciudad capturada por Rusia después de su invasión el 24 de febrero.
Pasa Ucrania a la ofensiva contra Rusia en zonas ocupadas
Con Información de Agencias
