Un accidente en una cárcel dejó por lo menos 51 prisioneros muertos, cuando esta se incendia provocando la intoxicación por humo de la mayoría de las víctimas, las cuales mueren al interior del inmueble, hay por lo menos otros 28 reos hospitalizados debido a sus lesiones.
La tragedia que diezmó a esta población penitenciaria, ocurrió en la cárcel de la ciudad colombiana de Tuluá, en el departamento del Valle del Cauca (suroeste de Colombia), de acuerdo a informes de fuentes oficiales.
Te Puede Interesar: Balacera en centro de vacunación Covid-19 para niños de Puebla
El general Tito Castellanos, director del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), informo a una cadena de radio que la cifra oficial hasta el momento del trágico hecho asciende a “51 (muertos), de ellos 49 dentro del establecimiento y 2 que fueron trasladados a centros médicos”.
En el mismo informe, el oficial detalló que “la mayoría de los fallecidos es por inhalación de humo” y que se avanza en las labores de identificación, que están a cargo del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), de la Fiscalía.
Hasta el cierre de esta nota, se informaba un recuento de 51 fallecidos, inicialmente se mencionó que eran 49 reclusos, en tanto que otros 30 resultaron heridos, estos últimos fueron trasladados a hospitales de la región donde dos de ellos murieron.
No se tienen informes sobre personal de custodios que hallan resultado lesionados en el percance, sin embargo, según las primera versiones, algunos resultaron afectados por el voraz incendio.
Lo que si se sabe, según palabras del general Castellanos a periodistas, es que supuestamente, la tragedia comenzó con una riña que degeneró en un motín en el cual algunos presos prendieron fuego a colchones, lo que originó un incendio que se propagó por gran parte de la prisión de mediana seguridad.
Según las primeras versiones, este incendio habría comenzado después de la 1:00 hora local y aunque los bomberos de Tuluá llegaron rápidamente para controlar el fuego en esta cárcel que alberga mil 267 reclusos y tiene una sobrepoblación de 17 por ciento, muchas de las víctimas murieron por inhalación de humo.
Por su parte, el presidente colombiano en funciones, Iván Duque, que está de visita de trabajo en Portugal, lamentó la tragedia y expresó su solidaridad con los familiares de las víctimas.
A través de su cuenta de Twitter, Dique expresó que está en contacto con el director del Inpec y dio “instrucciones para adelantar investigaciones que permitan esclarecer esta terrible situación”.
Por su lado, el presidente electo, el izquierdista Gustavo Petro, dijo en redes sociales que “lo acontecido en Tuluá, como la masacre en La Modelo (en marzo de 2020 en Bogotá), obliga a un replanteamiento completo de la política carcelaria de cara a la humanización de la cárcel y la dignificación del preso”.
El ex guerrillero Petro expresó sus condolencias a los familiares de los presos muertos y agregó que “el Estado colombiano ha mirado la cárcel como un espacio de venganza y no de rehabilitación”.
Se incendia cárcel y mueren 51 prisioneros
Con Información de Agencias
