Un incidente vial en una de las zonas más transitadas de Pachuca terminó en la trágica muerte por arma blanca de un conductor cuando la discusión con un taxista desembocó en la agresión a navajazos.
El taxista, fue detenido por elementos policiacos que llegaron más tarde al lugar como el presunto agresor y responsable de la muerte, a pesar de que también resultó con una lesión grave en una mano.
Los hechos ocurrieron en la glorieta situada bajo el Puente Atirantado, donde, según reportes de las autoridades de seguridad que acudieron al lugar, uno de los involucrados utilizó un objeto punzocortante para atacar al otro por la espalda, causándole heridas que resultaron fatales.
El presunto responsable fue identificado como chofer de un taxi metropolitano con placas A-Z49 FUU. El hombre también sufrió una lesión importante en la mano durante el altercado, por lo que tuvo que ser trasladado a un hospital, donde permanece bajo custodia policial.
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La escena del crimen fue acordonada por elementos de seguridad, mientras que personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) inició las investigaciones correspondientes para esclarecer los hechos.
Testigos presenciales, tanto peatones como automovilistas, narraron que la disputa comenzó por una maniobra imprudente: uno de los vehículos le cerró el paso al otro. La tensión aumentó rápidamente hasta que ambos bajaron de sus unidades. Fue entonces cuando, según relataron, “uno de ellos sacó un arma blanca, con la que picó la espalda del otro; una herida letal que lastimó los órganos”.
El caos vehicular que frecuentemente se vive en esta intersección habría sido un factor detonante en el conflicto, pues los testigos mencionaron que “el contexto de la confrontación fue el tránsito lento por el congestionamiento vial que se genera en esa zona, lo cual también ha generado choques previos”.
Cabe destacar que esta glorieta forma parte del polémico Puente Atirantado, una infraestructura construida durante la gestión de Omar Fayad Meneses (2016-2022), actual embajador de México en Noruega.
La obra, cuyo costo final superó los 500 millones de pesos —tras un aumento de 100 millones respecto al presupuesto inicial—, fue promovida como una solución a los problemas de movilidad en la zona metropolitana de Pachuca.
Sin embargo, con el paso del tiempo, el puente ha sido objeto de críticas debido a que no resolvió los problemas de tránsito como se prometió. Por el contrario, en ciertas áreas ha empeorado la circulación y aumentado el peligro para los peatones.
En respuesta a estas quejas, la actual administración estatal realizó un análisis técnico que concluyó que corregir los problemas estructurales del puente requeriría una inversión casi igual al costo original de la obra, lo que fue catalogado como inviable por las autoridades. Aun así, se anunció la asignación de 50 millones de pesos adicionales para abordar únicamente reparaciones básicas.
Con Información de Agencias
