“Don Neto”, enfermo de cáncer, vive a todo lujo su libertad condicional – Ernesto Fonseca Carrillo, Don Neto, fundador del cártel de Guadalajara, a sus 89 años, recién cumplidos, vive a todo lujo su libertad condicional, los ocho de los 40 años que restan de su condena, esto gracias a los integrantes del Primer Tribunal Colegiado en la materia con sede en Jalisco quienes en marzo de 2017 le otorgaron un amparo.
Fundador del Cártel de Guadalajara junto con Rafael Caro Quintero y Miguel Ángel Félix Gallardo, Don Neto fue sentenciado a 40 años de cárcel por narcotráfico y por el homicidio del agente de la DEA Enrique Camarena Salazar, así como por la muerte del piloto mexicano Alfredo Zavala, en hechos ocurridos en 1985.
Su condena debería terminar en 2025, pero en septiembre de 2015 obtuvo el beneficio de la prisión domiciliaria, cuando le faltaban 10 años para cumplir su sentencia, la mayor parte cumplida en cárceles federales.
El 20 de julio de 2016 un hombre de entonces 86 años fue trasladado en una ambulancia desde el penal de Puente Grande hasta el Aeropuerto Internacional de Guadalajara. La imagen contrastaba con la del hombre que 30 años antes había sido detenido y que en la rejilla de prácticas tenía el sentido del humor suficiente para hacer con los dedos la señal de amor y paz.
Ernesto Fonseca Carrillo “Don Neto”, nació en Badiraguato, Sinaloa, el 1 de agosto de 1930, es tío de los narcotraficantes Amado Carrillo Fuentes “El Señor de los Cielos” y Vicente Carrillo Fuentes “El Viceroy”. Junto con Miguel Ángel Félix Gallardo y Rafael Caro Quintero fundó el Cártel de Guadalajara en la década de los ochenta.
Gracias al amparo otorgado el capo goza de su libertad que le permite vivir en una lujosa residencia que habita en un fraccionamiento, Valle Escondido, del municipio de Atizapán de Zaragoza en el estado de México; “bendita justicia mexicana”.
Imágenes de “Don Neto” el día de su salida a su residencia de Atizapán de Zaragoza en el estado de México.
Don Neto, casi ciego y con cáncer de colón
El beneficio de la libertad condicional, promovido por la defensa de Don Neto, le fue otorgado luego que su familia demostró que Fonseca Carrillo, detenido en 1985 en Puerto Vallarta, está casi ciego, padece cáncer de colon, reumatismo, hernia hiatal, hipertensión, paralización parcial del brazo derecho y otras enfermedades derivadas de su avanzada edad.
El juicio quedó en manos del juzgado sexto de distrito en materia de amparo, con sede en Jalisco, mismo que dictó sentencia el 28 de noviembre y resolvió brindar la protección de la justicia federal a Fonseca Carrillo.
La resolución fue combatida por el Ministerio Público federal y el caso se turnó al Primer Tribunal Colegiado en materia penal del Tercer Circuito pero los magistrados José Guadalupe Hernández, Rosalía Isabel Moreno Ruiz y Lucía Moreno Ríos determinaron por unanimidad ratificar la decisión de amparar a Don Neto.
Paseo del capo “casi ciego y con cáncer de colón” por los jardines de la residencia, donde no se aprecia que requiera de ayuda para no tropezar o lo “achaques” particulares de alguien con enfermedad terminal.
Un “bonachón” “Don Neto”, saludando a la “banda”, durante su presentación a los medios el día de su arresto.
Don Neto, tortura y crimen de “Kiki” Camarena
“Don Neto” habría aportado a la organización criminal su experiencia para traficar drogas, además de ayudarlos a aterrizar las ideas.
Es considerado precursor de las organizaciones trasnacionales de tráfico de droga modernas, tejió alianzas con grupos de Colombia para exportar cocaína a Estados Unidos.
Autoridades estadounidenses señalaron que fue durante una fiesta navideña en 1984, organizada por “Don Neto” y a la que asistió Caro Quintero, donde se planeó el secuestro y asesinato del ex agente de la DEA Enrique “Kiki” Camarena Salazar, quien había logrado infiltrarse en la organización criminal.
Sin embargo, la DEA lo tenía en el radar desde 1982 cuando descubrió sus operaciones de lavado de dinero en San Diego.
El 7 de abril de 1985, el narcotraficante y sus cuerpos de seguridad fueron ubicados por el Ejército en Puerto Vallarta, donde fue rodeado y detenido.
Camarena Salazar fue secuestrado, torturado y mantenido vivo con distintos medicamentos para prolongar su agonía.
Fonseca Carrillo junto con Caro Quintero fue sentenciado a 40 años de prisión por el asesinato y secuestro de Camarena y de Alfredo Zavala Avelar.
Foto familiar de Ernesto Fonseca Carrillo y dos de sus hijos, la imagen tiene más de 30 años.
Todos unidos, familia y “justicia” para rescatar al capo
Después de permanecer 30 años en prisión, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) le otorgó el beneficio de que cumpliera el resto de su condena en prisión domiciliaria, un recurso que se otorga a reos que ya cumplieron la mayor parte de su condena, en avanzado estado de edad o con problemas severos de salud.
“Don Neto”, cumplía los tres patrones. Su hija Yoanna Carrillo señaló, luego de sacar a su padre de la cárcel, que Fonseca Carrillo estaba casi ciego, padece cáncer de colon, reumatismo, hernia hiatal, hipertensión, paralización parcial del brazo derecho y otras enfermedades.
Desde entonces, ‘Don Neto’ vive en un domicilio ubicado en un residencial de lujo en Atizapán de Zaragoza, en el Estado de México. La decisión despertó toda una serie de críticas al tratarse de un lugar en el que el narcotraficante goza de todas las comodidades.
Cuando salió de prisión se le obligó a permanecer en el lugar donde estaba monitoreado las 24 horas a través de un brazalete electrónico, sin embargo en 2017 consiguió la libertad total.
De los fundadores del Cártel de Guadalajara, el único que sigue en prisión es Félix Gallardo, cuya historia fue retomada en la tercera temporada de la serie Narcos, de Netflix.
Con información de: Sin Embargo y Proceso
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