El narcotraficante mexicano, Rafael Caro Quintero, este martes fue ingresado a una cirugía ambulatoria por un padecimiento de estenosis uretral, la cual le fue practicada en el Centro Médico “Adolfo López Mateos”, en Toluca, Estado de México.
El apodado “narco de narcos” de 72 años, se mantiene preso en el penal de máxima seguridad de El Altiplano, en Almoloya de Juárez, al relacionarse con el asesinato del agente de la DEA, Enrique “Kiki” Camarena Salazar.
Desde muy temprano dio inicio el traslado vía aérea y fue alrededor de las 7:00 horas cuando la aeronave de la Guardia Nacional se acopló en el helipuerto del citado Centro Médico gubernamental.
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Por tierra y, en apoyo al helicóptero que trasladó a Caro Quintero, se implementó un fuerte operativo conformado por al menos 71 elementos, entre personal militar, de la Guardia Nacional, del Sistema Penitenciario Federal y de la Policía mexiquense.
Hace unos meses, la defensa del narcotraficante sinaloense alegó ante los tribunales la urgencia de que su cliente fuese operado del mal que padece desde hace años, pero fue hasta ahora que lo ingresaron a una sala de hospital.
