La pandemia del coronavirus (Covid-19) obligó al sector bancario a modificar sus protocolos de atención para mantener la continuidad del servicio, que incluyen reforzar los esquemas de higiene en las áreas de sucursales, oficinas y cajeros automáticos, así como reducir la plantilla de personal y restringir el acceso de clientes.
En este marco, las sucursales bancarias locales implementaron a partir del martes medidas preventivas para evitar el contagio de la enfermedad y ofrecer mayor seguridad para la salud de sus colaboradores, clientes y usuarios, acorde a las disposiciones emitidas por el sector salud a nivel nacional.
De acuerdo con la Asociación de Bancos de México (ABM), a partir de esta semana las sucursales cuentan con gel antibacterial y deben esparcir a los clientes y usuarios en áreas de atención en plataforma, ventanilla y cajeros automáticos, lo cual se mantiene también bajo una asepsia constante para mantener la continuidad del servicio.
Por emergencia sanitaria restringen bancos el acceso de clientes; se toman medidas contra el coronavirus para empledos y clientes.
Lo anterior provocó que los bancos empezaran a restringir el acceso de clientes a las sucursales, algunas de las cuales sólo permiten la entrada de una persona por operación y otras por grupos de tres en tres o de 10 personas, dependiendo de la institución, además de reducir su número de colaboradores al mínimo para minimizar el riesgo de contagio.
Ante esta situación, los bancos le apuestan a las plataformas digitales para que los usuarios y clientes puedan realizar sus transacciones, a fin de que sólo asistan a las sucursales para realizar aquellas operaciones que requieran su presencia física.
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