Seguramente «Lulú» nunca en lo que le queda de vida tendrá problemas para conseguir sus croquetas y huesitos, su extinto dueño, el magnate Bill Dorris le heredó a esta perra la estratosférica cantidad de cinco millones de dólares.
Según la última voluntad del difunto, el dinero se guardará en un fondo especial y se utilizará para los costos de mantenimiento del animal, dieron a conocer este jueves medios locales tras conocerse la fantástica nota.
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En el testamento del amoroso dueño puede leerse «Cinco millones de dólares serán transferidos a un fideicomiso que se creará tras mi muerte para el cuidado de mi border collie Lulu […] para satisfacer todas sus necesidades»,.
Sin embargo, no se especifica allí qué pasará con tal suma de dinero cuando Lulu, que tiene ocho años, muchos ya para un canino, fallezca algún día, pues obviamente la perrita no puede expresar su voluntad al respecto.
Por el momento, el animal permanecerá bajo custodia de una amiga del fallecido, Martha Burton. «Francamente, no sé qué pensar al respecto, para decir la verdad. Él realmente amaba al perro», dijo la nueva propietaria del animal.
Afortunada también, pues administrará estos bastos recursos, y tras admitir, con una sonrisa, que no hay forma de gastar cinco millones de dólares en el can, Burton dijo que «bueno, me gustaría intentarlo». Actualmente, el patrimonio de Dorris está en proceso de sucesión y transferencia al fondo para su uso posterior en beneficio de Lulu.
Con Información de RTenespañol.com