Luego de un año de la presente administración municipal, el padrón de vendedores ambulantes, que al principio era de dos mil, llegó a 4 mil 900 como resultado del proceso de regularización, de recorridos más frecuentes en algunos sectores y operativos de verificación, aseguró Amílcar Israel García Lorenzo, director de Comercio en la Vía Pública.
Luego de señalar que eso se logró con el mismo personal, sostuvo que en las inspecciones se centran en aspectos de imagen y ordenamiento.
“El padrón que recibimos no correspondía con la realidad que encontramos en el municipio. Encontramos a vendedores que trabajaban de manera irregular y a otros con permisos, pero con atrasos de un año y hasta año y medio en sus pagos“, añadió.
A manera de ejemplo, dijo que en los tianguis se trabajó diariamente durante tres meses y gracias a eso creció el padrón, se recuperó una cartera vencida de casi un millón de pesos y la recaudación aumentó casi 38 por ciento.
El funcionario apuntó que se están otorgando nuevos permisos y que apenas el pasado viernes, durante la 12 sesión del Comité Dictaminador, que cada mes se reúne con el regidor Humberto Aldana Navarro, presidente de la Comisión de Industria, Comercio y Asuntos Agropecuarios, se analizaron expedientes y autorizaron permisos.
Estamos construyendo un plano en el que podamos identificar las zonas donde está creciendo más el comercio y en cuáles podemos autorizar permisos. En las 12 sesiones del Comité Dictaminador se han otorgado como 230, que representan un 40 por ciento de los expedientes recibidos, continuó.
Luego de calcular que el padrón del municipio podría llegar a 7 mil u 8 mil ambulantes, dijo que muchos permisos se niegan porque están en zonas restringidas o porque no cumplen lo que marca el reglamento. En todo caso, se informa al solicitante de las razones para que corrijan lo que se les pide y volver a ingresar su expediente.
García Lorenzo dijo que se mantiene supervisión en prácticamente todas las áreas conflictivas, las de mayor queja, como El Crucero, donde se redobló la supervisión para mantener el área limpia ahora que las vialidades están abiertas.
Antes de las obras se levantó un censo que arrojó 200-250 vendedores, de los cuales sólo algunos tenían permisos. Optaron por reunirse con los sindicatos, que tenían un padrón más preciso de esa zona, para proceder a una reubicación y retirar toda la gente que no tenía permiso, a la cual se le otorgó autorización en zonas donde sí se puede llevar a cabo la actividad.
Asimismo, aseguró que también mantienen operativos de manera regular en escuelas a la hora en que salen los alumnos y tianguis, buscando una mejoría en la recaudación con base en el número de permisos asignados y llegar a tener un padrón más real.
La semana pasada atendimos quejas de las multiplazas, Kabah, Leona Vicario y Kabah con 20 de noviembre. Tuvimos pláticas con los administradores sobre los vendedores que están a un costado de las plazas. Hicimos un reajuste, luego de detectar a un par de vendedores sin permiso, los cuales fueron retirados. Los demás tienen un permiso autorizado en otras administraciones, indicó.
Nos centrarnos en temas de imagen y ordenamiento. Hay vendedores que exceden las dimensiones y tratamos de que se apeguen a lo que marca el reglamento. Hay quienes obstruyen por completo las banquetas, los visitamos, les dejamos un acta de verificación y les pedimos que se acerquen a la Dirección, donde les damos las recomendaciones necesarias, prosiguió.
Aseguró que si se trata de reincidentes, entonces buscan por la revocación del permiso por no hacer caso a la autoridad.
