Pedro Pablo Elizondo Cardenas, obispo de la Diócesis Cancún-Chetumal, es decir de Quintana Roo, argumentó que prefiere pagar una condena en prisión que pagar la sanción económica que le seria impuesta por la Secretaria de Gobernación tras la sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), por inmiscuirse en temas políticos.
El prelado fue sentenciado por el organismo de justicia electoral luego de que en pleno proceso de las pasadas elecciones para presidentes municipales, solicitó a sus feligreses no votar por candidatos que apoyaran el aborto dentro de sus campañas.
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Presumiblemente, la sanción económica a la que se haría acreedor el religioso, seria de hasta tres millones de pesos, por lo cual Elizondo Cárdenas ya revocar esta sentencia busca a través del equipo de abogados de la iglesia católica.
El Obispo consideró injusta e impagable esa cantidad de dinero, «Es desproporcionado, todo mundo dice que es una exageración, una desproporción y una injusticia, pero ellos son los jueces y ante ellos se presentan los argumentos, para que se revoque esta sentencia, o nos vamos a la corte Interamericana d Derechos Humanos» aseguró.
Por lo cual se dijo dispuesto a enfrentar esa sanción purgando una condena en prisión «Yo no voy a pagar, de donde saco esos tres millones?, si me meten a la cárcel, pues allí los pago con tiempo de cárcel hasta que se cubra la sentencia, ahí lo pago con mucho gusto» sentenció.
Sin embargo, es mediante estrategias legales que la iglesia católica busca salvar del «encarcelamiento» al líder católico, «Estamos esperando que la sala superior revoque esa sentencia, que no tiene suficiente sustancia, por lo que yo dije, por lo menos lo que a mi me toca, fue una invitación a reflexionar el voto, nunca mencioné ni estive haciendo proselitismo» explicó.