Jardín de eventos da su versión sobre fraude de la boda de Dulce María.- Luego de que la actriz denunció públicamente l supuesto fraude por parte de los administrativos del lugar en donde tenía planeado casarse, la directora del establecimiento rompió el silencio y contó su versión de los hechos.
Jardín de eventos da su versión sobre fraude de la boda de Dulce María.
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Durante su participación en el programa La Saga, conducido por Adela Micha, la cantante Dulce María aseguró que fue víctima de una estafa por parte del Rincón Meztitla, jardín de eventos ubicado en Tepoztlán, donde realizaría su boda con el productor Francisco Álvarez.
La ex integrante de RBD contó que ya tenía apartado un lugar para la celebración y tuvo que pagar el 100% del anticipo, después le salieron con la sorpresa de que no se podía realizar ahí debido a que el lugar no estaba consagrado para casarla con su prometido y hasta se quedaron su dinero.
Ante estas declaraciones, la directora del Jardín Rincón Meztitla, Denise Romero, compartió en exclusiva con la revista Quién, una carta en la que narra cómo sucedieron los hechos.
Según Denise Romero, desde el 6 de marzo de este año inició negociaciones con la wedding planner de la artista.
“Desde el principio su wedding planner nos comentó que tenía una exclusividad con una revista y nos solicitaba la renta del espacio gratis o con un descuento a cambio de la publicidad. Finalmente accedimos a un descuento y nosotros los recibimos con los brazos abiertos», comentó Romero en la entrevista para el medio.
Aunque Dulce María había dicho que el lugar no estaba consagrado, la directora del lugar le consiguió un documento escrito autorizado por la iglesia que avalaba que el lugar era apto para una ceremonia religiosa, aun así la pareja les canceló.
El 11 de marzo la coordinadora del lugar confirmó la fecha para el evento que se llevaría a cabo el 19 de octubre de este año, en el mismo escrito, se señala que solicitaron el 20% de anticipo, sin embargo Denise aseguró que la weddin planner hizo caso omiso.
Otros clientes querían solicitar el lugar para la fecha de Dulce María, por lo que notificaron a la organizadora, y ella ofreció pagar el 100% de la renta del lugar para que su descuento se respetara.
Según el contrato que firmaron, en caso del cancelación solo se podía regresar el 10 por ciento por penalización, no obstante, la directora se sintió presionada debido a que los clientes son personas famosas.
“Hablé directamente con Paco y me dijo: ‘No tengo ningún problema contigo, pero si no nos regresas el dinero sí habrá problemas. Sí me dio miedito y les propuse regresarles el 30% del depósito y para dejar la fiesta en paz les dije que les regresaba el 50 por ciento».
“Luego me dijo que no, que aceptaban el 30 por ciento que les había dicho y que hacían la (boda) civil y que se quedaban con la fecha. Se les hizo llegar el nuevo contrato en el que debido a la cercanía con la fecha de la boda, en caso de cancelación ya no aplicaría devolución alguna. Días después me manda un mensaje la wedding planner para volver a cancelar y fue ahí donde todo estalló”, finalizó.
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