Lázaro Cárdenas, Quintana Roo.- Sin posibilidad ya de emplearse por el bajo movimiento económico de la región, pero sobre todo por sus ya 72 años, Andrés Koyoc Cen, tiene, sin embargo, la misma, o quizás más voluntad de sus años mozos, para enfrentar la vida y seguir viviendo en las mejores condiciones posibles.
Este hombre de la tercera edad, de pura cepa maya, tiene aún su salud y sus manos para autoemplearse y para ello, con materiales propios de la región elabora escobas artesanales que comercializa en el mercado local para ganarse el sustento que le sigue permitiendo atender las necesidades básicas de su familia.
Vecino de la colonia Miguel Borge Martín, el veterano habitante señaló que apenas logró terminar su educación primaria, lo que le redujo las posibilidades de hallar empleo.
“Al no tener esa oportunidad tuve que buscar mis formas para obtener recursos y, uno de ellos, fue la elaboración de escobas artesanales que me ha permitido mantener a mi familia», explicó.
Andrés Koyoc Cen admite que a sus 72 años de edad, la manufactura de escobas es la única oportunidad que tiene para su sustento económico.
Sobre su actual ocupación, dijo que la ejerce desde hace más de 25 años.
“Tengo que cortar las maderas, la palma conocida como huano o chit y, luego, en mi casa, me pongo a elaborarlas, a veces logro terminar hasta 15 o 20 escobas que vendo en las tiendas o directamente en mi casa”.
Koyoc Cen, optimista, aunque realista, admitió que a sus 72 años de edad, la manufactura de escobas es la única oportunidad que tiene para su sustento económico.
“No me quejo de lo poco o mucho que pueda vender, porque mis hijos, están pendientes de nosotros, pero para mí es fastidioso si no trabajo; por eso me dedicaré a elaborar escobas hasta cuando pueda”, sostuvo en una especie de promesa de desafío al tiempo.
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