Cuarta transformación: en la plaza del Zócalo capitalino se reúnen más de 50 mil personas para celebrar la toma de protesta del nuevo Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Desde las 10 de la mañana familias estaban reunidas para para observar la toma de protesta, algunos lloraban al ver al nuevo Presidente recibir la banda presidencial.
Dos pantallas se instalaron para que la gente que asistiera, pudiera observar el cambio de Presidente.
Los gritos se hacían notar, “Es un honor estar con Obrador”, las personas están entusiasmadas por la llegada del nuevo Presidente, quien estuvo por más de 12 años en campaña.
Los aplausos eran infinitos, algunos gritaban “¡Sí se pudo, sí se pudo!”, otros se quitaban sus gorras de color vino.
Ahora los festejos de la gente se ven opacados por la esperanza que tienen, debido a que asumen que habrá un cambio.
El discurso de López Obrador, fue en contra de la corrupción, las personas que se reúnen para festejar su llegada a la Presidencia, celebran el nacimiento de la Cuarta Transformación.
La celebración después de la toma de protesta
La celebración cultural, se llenó de bailes folclóricos que representan a México.
La música ruboriza la piel de todos los mexicanos, las personas sonríen mientras tienen sus paraguas para evitar que les queme el sol.
Los colores culturales se juntan con el de la bandera hondeada, no existe ninguna lágrima, todos confían que el cambio ha llegado.
Los que tienen el micrófono cuentan la historia de lucha por la que paso el Presidente, una persona mira firmemente a la bandera de México mientras los cánticos culturales suenan.
A lo lejos se observa un águila real que desciende para posarse y formar parte de la bandera tricolor.
La Bandera de México que esta ondeada en el Zócalo, tiene un nombre gravado que es imposible de ver si no miras bien, es el nombre del nuevo Presidente de México.
Los reunidos afirman que es un verdadero cambio, López Obrador se ha convertido en uno de los Presidentes más famosos que ha tenido México.
Este 1 de diciembre fue el punto final, ahora solo queda esperar y confiar en que el nuevo Presidente no se vuelva uno más.
