Mapimí, Durango.- Terrible accidente sufrió un pequeño de tan sólo 5 años de edad, quien tras estar jugando con gasolina y cerillos, se prendió fuego teniendo como consecuencia, quemaduras de segundo y tercer grado en diferentes partes de su cuerpo.
El niño bebió la gasolina tras encontrarla
De acuerdo a versiones de algunos testigos, el niño estaba jugando afuera de su casa con normalidad, pero de pronto, en la calle de enfrente, que es un lugar donde se estacionan los camiones que van de paso, el pequeño encontró un bidón lleno de combustible y cerillos, que se cree pertenecía a algún chofer de los que estaban estacionados allí, y comenzó a beberla mientras jugaba con el recipiente.
De pronto, una flama se pudo observar y el pequeño empezó a gritar mientras quedaba envuelto en llamas con quemaduras en las manos y rostro, las cuales se reportaron de segundo y tercer grado.
La mamá vio al niño en llamas
Por su parte, la mamá del pequeño César, explicó que cuando escuchó los gritos de su hijo, salió de su casa y vio cómo su hijo estaba envuelto en llamas, por lo que de inmediato solicitó ayuda de los paramédicos y bomberos de la localidad, para saber cómo manejar dicha situación
Minutos más tarde, los elementos acudieron al lugar y le brindaron los primeros auxilios al pequeño, quien tuvo que ser trasladado de emergencia al IMSS de Gómez Palacio, para que le realicen una valoración médica.
El estado de salud del niño es grave
En estos momentos, como les mencionamos antes, el niño se encuentra grave y está en una cirugía.
Para finalizar, el agente del Ministerio Público abrió la carpeta de investigación para determinar alguna acción legal en contra de la madre, en caso de que tenga alguna responsabilidad con el accidente.