Puebla.– El robo de combustible en la capital de Puebla creció desmesuradamente en 2018, pues de solo tres tomas clandestinas registradas en 2017, pasó a 136 durante 2018, según la plataforma de datos Gobierno Fácil; con esto la capital se colocó entre los cinco municipios con mayor número de tomas clandestinas, con ello los gobernantes, municipales y estatales, panistas convirtieron al estado en el reino de los huachicoleros.
De acuerdo con los datos publicados ayer, Puebla es el municipio en donde más creció el huachicol en el último año, al amparo de las autoridades. No se ha dado a conocer algún operativo contra el robo de combustible a ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) en la capital.
Periódico Central, un diario poblano, publicó en noviembre de 2018 que la junta auxiliar de Xonacatepec es la cuna del huachicol en la capital, y que rutas del transporte público de todo el municipio se surten de Gas LP.
El segundo municipio donde más creció el robo de combustible fue San Martín Texmelucan, ahí pasaron de 303 tomas en 2017, a 828 tomas para 2018, eso pese a que en mayo el Gobierno del estado detuvo a los policías municipales por estar involucrados con el crimen organizado y tomó el control de la seguridad pública.
El incremento exponencial del huachicol no está desglosado por mes, así que no hay certeza de si las tomas clandestinas se dispararon en la administración de Luis Banck o si fue con Claudia Rivera, quien tomó protesta el pasado 14 de octubre.
El malogrado matrimonio de los Moreno Valle, sentaron las bases para la ordeña de combustible, previo a su accidente trascendió que eran investigados por esa razón, la indagatoria no concluyó.
San Martín Texmelucan, que está solo a 30 minutos de la capital poblana, se convirtió en la cuna del huachicol en el estado, con un total de 828 tomas clandestina en 2018 se convirtió en el municipio con más tomas clandestinas en Puebla.
El incremento sucedió a pesar de que en mayo el entonces gobernador Antonio Gali tomó el control de la seguridad del municipio, pues descubrieron que la mayoría de los policías estaban coludidos con el crimen organizado.
En segundo lugar está San Matías Tlalancaleca, con 261 tomas; después Tahuapan, con 174 y luego Puebla, con 136.
Sin embargo, San Martin y estos municipios incluso desbancaron a Palmar de Bravo, Tepeaca y Quecholac, que en 2016 encabezaban la lista como los municipios con más huachicol y ahora están por debajo.
Ilse Lucía Bernabé Gutiérrez, esposa de Rafael Valencia Ávila, presidente municipal de Venustiano Carranza, Puebla, fue arrestada por robar combustible en la zona.
De acuerdo con datos de Pemex, en 2017 la ordeña de ductos provocó pérdidas por 30 millones de pesos y aunque se tenía conocimiento de robo en 25 estados del país, el top cinco lo conforman Guanajuato, Tamaulipas, Puebla, Veracruz y el Estado de México.
Puebla ocupó el primer lugar durante todo 2018 con mil 815 tomas clandestinas; Hidalgo el segundo, mil 726; Guanajuato el tercero, mil 547; Veracruz el cuarto, mil 338; Estado de México el quinto, con mil 268; Jalisco el sexto con mil 263; y Tamaulipas el séptimo lugar con mil 084 tomas.
Además, durante 2018, Puebla fue el estado donde se recuperó el mayor número de vehículos y camionetas utilizadas por bandas dedicadas al huachicol para el trasiego del combustible, así lo detalló en un informe la Procuraduría General de la República (PGR).
La dependencia federal dijo que durante el año se decomisaron un total de 21 mil 757 unidades en México; de las cuales, 3 mil 818 fueron aseguradas en Puebla. La capital poblana, San Pedro Cholula y Acatzingo son los municipios que registraron mayor número de vehículos asegurados.
Dos policías, uno asignado al municipio de Puebla y otro del Estado, fueron sorprendidos realizando actividad de compra-venta de combustible, en San Pablo Xochimehuacán.
El Gobierno mexicano cerró la pinza al robo de combustibles en el país, ahora por el lado financiero. Políticos, dueños de gasolineras y hasta funcionarios públicos fueron ya detectados en el blanqueo de los capitales que provienen del huachicol, en una operación en la que participan dependencias como la Secretaría de Hacienda, la Defensa Nacional, el mismo Pemex y Seguridad Pública.
El pasado 14 de enero, el Presidente Andrés Manuel López Obrador hizo corte del plan para combatir el robo de combustible. Una parte de su gabinete apareció con él en la conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional.
Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda, dijo que se está llevando a cabo un análisis de dos tipos de reportes bancarios: operaciones inusuales y relevantes. Dijo que se están analizando todos los reportes vinculados con las gasolineras; y se están ubicando los mayores depósitos bancarios realizados detectados conforme a los estados por donde pasan los ductos.
Muchas gasolineras a partir de la reforma, dijo, lo que hacen es comprarle a Pemex, pero sus ventas superan las compras que han desarrollado frente a Pemex. Explicó que en el análisis por lavado de dinero, se han tenido más de 14 mil reportes; y se han detectado al menos 10 mil millones de dólares blanqueados relacionados con el robo de hidrocarburo.
Precisó que hay cinco casos específicos que ya han sido llevados ante la Procuraduría General de la República: se trata de empresarios, pero también de un ex funcionario de Pemex, un ex Diputado local y un ex Edil. Señaló que el modos operandi es: la comercialización de huachicol, pero también el blanqueo de esos capitales. Dijo que se han detectado transferencias internacionales por montos que oscilan hasta 2 millones de dólares y compra de automóviles de lujo; compra de boletos de avión, joyas, obras de arte para blanquear. Precisó que hay 15 personas a quienes se les ha bloqueado la cuenta de forma directa, con un total de 24 personas relacionadas.
En el sexenio de Vicente Fox (2000-2006) no había huachicoleros; les llamaban chupaductos.
A finales de enero, el Presidente López Obrador realizó la segunda parte de una gira por municipios donde pasan ductos de Pemex en Puebla e Hidalgo y en entrevistas realizadas por el portal de noticias SinEmbargo, habitantes manifestaron problemas con el censo, desinformación, temor a los intermediarios y las necesidades reales por los beneficios que recibirán por los programas sociales que el Gobierno de México implementará para combatir el robo de combustibles.
López Obrador reiteró la petición a la gente de que ya no se dedique al robo de combustible. Lo dijo en Puebla, estado que no visitaba desde que le fue entregada su constancia de mayoría y lo repitió más tarde en Hidalgo, a 127 kilómetros de distancia de Tlahuelilpan, donde hace una semana ocurrió “la tragedia del huachicol”.
Y aunque una de las promesas de López Obrador es asegurar que el dinero de los apoyos no pasará por intermediarios, es la costumbre o las malas experiencias las que provocan que éste sea uno de los principales temores de la gente.
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