Será mañana viernes en sesión de cabildo cuando se vote la propuesta de la presidenta Laura Beristain Navarrete de otorgar para este 2020 la cantidad de 50 millones de pesos más para el DIF municipal que preside su pareja sentimental, según ha reconocido públicamente, Karla Robles.
Ha trascendido que este incremento a las arcas del DIF municipal tiene fines electoreros para ir preparando el terreno para un posible intento de reelección a cambio de «ayudas y apoyos».
De igual forma ha trascendido que pretende otorgar un mayor presupuesto a Desarrollo Social, o sea programas clientelares.
Esta propuesta de Laura Beristain vendría a sacrificar el rubro de ‘obra pública’ que este año se vio reducida en comparación con lo que en este sentido se realizó durante el año 2018, afectación que se incrementa pues para este 2019.
Solidaridad recibió 500 millones del Gobierno federal para ‘obras’ y ya no habrá más para 2020.
Sumado a ello, diversos sectores como el empresarial se preguntan en que se aplicarán los alrededor de 60 millones de pesos que el gobierno laurista estará cobrando por la concesión de los parquímetros, que Beristain Navarrete quiere utilizar como «gasto corriente», cuando el primer plan era mejorar con este presupuesto el primer cuadro de la ciudad.
En este mismo tenor, también el empresariado local ha cuestionado la falta de claridad de esta administración con respecto al millonario presupuesto que se acumula con el cobro del derecho de saneamiento ambiental, que ahora debe andar por los 130 millones de pesos porque pese a la gran cantidad de dinero las autoridades del octavo municipio se han encargado de entorpecer la elección de la empresa que deberá mantener las playas limpias durante el recale de sargazo este 2020.