Desventajas de ser la amante y no la novia oficial.- Tomar este cargo no suele ser tan fácil como parece, en especial porque la pareja se comparte; una de las situaciones más complejas de comprender y de sanar en cuanto a sentimiento.
El hecho de aceptar ser la amante se deriva de muchas razones, aunque la más común es la codependencia que se genera, mientras hay una esposa/o de por medio, o en el peor de los casos, una familia formada.
Desventajas de ser la amante y no la novia oficial
1. La confianza se pierde
Hablamos de la confianza de uno mismo y que por ende, nos lleva a desconfiar de la otra persona; te preguntarás por qué y la respuesta es muy fácil: Si el engaño fue a su esposa, también te lo hará a ti en algún momento.
2. Se acaba la felicidad
Lejos de sentir adrenalina, llega un momento en el que ya no se es feliz porque estás compartiendo lo que “amas” y en muchas ocasiones los flashback son difíciles de controlar.
3. Deben adaptarse al engaño
Se vive bajo tiempos, reglas y determinaciones que jamás te serán consultadas; siempre él tomará la decisión y tú tendrás que acoplarte.
4. Decisiones en el limbo
No hay una línea que pueda seguirse, no sabes nunca si lo que hagas le gustará o le dará felicidad a la otra persona, por lo que un paso en falso podría acabar con lo poco o mucho que ya se haya logrado.
5. Se pierde la credibilidad
Las personas que conozcan el rol que cada uno ocupa en la relación ya no las verán de la misma forma; aunque a muchos esto es lo que menos les importa pues el ‘que dirán’, está de más.
Fuente: En Pareja.