Autoriza el Gobierno de Yucatán que los yates naveguen en la costa, a pesar de la actual pandemia del COVID-19; por lo que las marinas turísticas podrán operar en las vacaciones de verano, se especificó que puedan pasear entre seis y ocho personas por embarcación.
Es el protocolo establecido para este sector y que ya publicó la Secretaría de Salud estatal (SSY). Sin embargo, las playas yucatecas permanecerán cerradas al público en general en julio y agosto.
Las embarcaciones menores tomaran las siguientes medidas: a 40 pies de eslora tendrán un límite máximo de seis personas, mientras las que midan más, podrán llevar hasta ocho.
Toda embarcación, deberá́ tener siempre a disposición alcohol gel al 70 por ciento y respetar la capacidad permitida de acuerdo al tamaño de la misma.
En los yates únicamente podrán subir personas del núcleo familiar o que vivan bajo el mismo techo. Se recalcó que no se permitirán invitados ni reuniones o fiestas en las embarcaciones.
Piden las autoridades mantener una distancia mínima de 20 metros o más entre embarcaciones mientras se está en el mar, y se prohíbe anclarse acoderado o con naves pegadas una a la otra.
Sin embargo, este anunció causó controversia, pues únicamente familias con alto poder adquisitivo tendrán acceso a la costa en sus embarcaciones, pues hasta ahora el público en general no podrá ingresar a las playas de Yucatán en verano, según para evitar contagios por COVID-19.
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El hecho de reaperturar las marinas turísticas y los servicios a las embarcaciones generará una derrama económica para cuatro mil personas; mencionaron las autoridades yucatecas.