El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), advirtió hoy que por lo menos 730 niños han muerto por desnutrición en Somalia desde enero, desafortunadamente la cifra podría aumentar en los próximos meses, en los que se espera que zonas del centro y sur del país sean declaradas en hambruna.
Wafaa Saeed, responsable de Unicef para Somalia, explicó que “Un millón y medio de niños, casi la mitad de todos los menores de cinco años, podrían sufrir desnutrición aguda, y de ellos 385 mil necesitarán ser tratados, unos números sin precedentes”.
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La funcionaria internacional recordó que Somalia sufre actualmente su tercera sequía en apenas una década: la de 2011 causó la muerte de 260 mil personas, en su mayoría, niños, y la actual, con cuatro temporadas consecutivas sin lluvias, podría ser incluso peor, de acuerdo con los pronósticos de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU.
Además, subrayó que en el país 4.5 millones de personas necesitan con urgencia abastecimiento de agua, en un momento en el que los precios de este bien básico han aumentado entre un 55% y un 85% desde principios de 2022.
A lo que se suman las enfermedades, pues ha habido un aumento en lo que va de año de los brotes entre la población infantil de enfermedades como el cólera y la diarrea aguda (8 mil 400 casos desde enero) o el sarampión (13 mil casos), todo ello derivado de la crisis alimentaria y de la falta de agua.
Saeed destacó que “Necesitamos urgentemente que los donantes den un paso adelante y financien el plan de respuesta de la ONU para Somalia“, y agregó que hasta julio menos de un tercio de los mil millones de dólares solicitados para ayudar a Somalia habían sido ya donados, aunque la situación ha mejorado en los últimos meses.
La emergencia es especialmente grave en la región meridional de Bay, alertaron las Naciones Unidas, en torno a las localidades como Baidoa o Burhakaba, donde se prevé que haya que declarar la situación de hambruna entre octubre y diciembre, ya que las condiciones climáticas no permiten presagiar mejoras en la producción agrícola.
Stark warnings of looming famine in parts of Somalia underline the urgent need to scale up support for children. https://t.co/z1Ff5l7jnl
— UNICEF (@UNICEF) September 6, 2022
Y aun mas, a la ausencia de lluvias se unen, como cóctel que ha llevado la crisis en Somalia a niveles límite, décadas de conflicto, desplazamientos masivos de población y este año la fuerte alza de los precios de los cereales y otros alimentos básicos, derivada en parte de la guerra de Ucrania.
Hambruna mata a 730 niños en Somalia durante 2022
Con Información de Agencias
