La sangre, el ADN no se puede negar ni desconocer. El diputado federal Jesús Pool Moo no dudó en traicionar a Morena al pasarse a las filas del PRD, y tampoco lo pensó mucho al dejar al partido del sol azteca para retornar al PRI, su casa, partido que lo forjó y en su momento lo encumbró.
Romería: El suicidio político de Pool Moo
A ese partido volvió para darle el número de diputados que necesitaba en San Lázaro, y lograr presidir la mesa directiva del tercer año de trabajo legislativo en la Cámara de Diputados federal, aunque finalmente su objetivo, al menos de momento, no se logró.
Semanas atrás, el diputado Pool sorprendió con la noticia que dejaba las filas de Morena y se sumaba a la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), maniobra que fue condenada por los seguidores de partido guinda.
Sin embargo, el lunes pasado dejó estupefactos a muchos con la noticia que volvía, ni más ni menos, que a las filas del casi desaparecido Partido Revolucionario Institucional (PRI), lo cual, en el momento político que vive ese organismo en el estado y país, es un suicidio.
Cualquiera que haya sido la estrategia, la posible unión electoral del PRD y PRI en las elecciones del 2021 y la promesa de postularlo por la presidencia municipal de Benito Juárez, no es suficiente si consideramos que ambos partidos se han quedado con el cascarón y la mayoría de su estructura trabaja para el mejor postor, ya sea el PAN o Morena.
Como sea, el caso es que para muchos, el diputado Jesús Pool Moo se dio un tiro en el pie al retornar al tricolor, al cual abandonó en el 2016 precisamente por el repudio de los electorales, desprecio que sigue más vivo que nunca.
Pero además, está el hecho que, como ya dijimos, la maniobra fue para darle el número de diputados que necesita el tricolor, y poder presidir la mesa directiva en la cámara de diputados en el último año de trabajo de la actual legislatura, postura que ha sido calificada como desleal al movimiento que lo llevó a ocupar una curul federal.
El panorama se ve aún más surrealista puesto Pool Moo, una vez que el PRI logre su objetivo, volverá a la bancada del PRD.
De ser así, Pool Moo que gozaba de una imagen más o menos seria en el ámbito político, perderá todo respeto y se convertirá en la moneda de cambio que los partidos usan para llenar la bolsa de diputados que necesitan en San Lázaro.
Así las cosas en la cada vez más desaseada vida política de México. Hasta la próxima.
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