Los minoristas, ahora intentarán rastrear y monitorear cada uno de los elementos de tu experiencia al comprar en sus grandes tiendas. Ahora podrán conocer, desde tus hábitos de consumo, hasta tu ubicación y tu ritmo cardíaco.

Las compras del mañana

Walmart ha estado intentando patentar un diseño que consiste en un «asa de carrito de retroalimentación biométrica».

La solicitud de patente, fue presentada el 23 de agosto a la Oficina de Marcas y Patentes de Estados Unidos.

¿Cómo funciona?

Dicho invento, estaría colocado en los carritos de la compra y podrán medir el ritmo cardíaco, la temperatura, la velocidad y la cantidad de fuerza de cada cliente al ir caminando por toda la tienda.

El proyecto, indica que el carrito primero mide los datos biométricos «de referencia», para posteriormente comparar los datos en distintos puntos en una visita de compras a esta referencia.

Así es como funcionaría el carrito biométrico

¿Para qué?

Después, los datos recolectados, serían retransmitidos a un servidor central y en caso de que los datos indiquen que el cliente «no está satisfecho», el servidor central mandará una alerta a un asistente de tienda para que éste, se acerque y auxilie al cliente.

Además, con esto podremos darnos cuenta de la cantidad de datos que los minoristas desean conocer de nosotros.

La tecnología como parte de nuestra vida diaria

Esta es una señal de que no sólo los aparatos electrónicos, se están volviendo inteligentes, sino también nuestras tiendas.

Varios centros comerciales ya utilizan torres Bluetooth para rastrear a los compradores en las tiendas.

Y otras nuevas tecnologías como lo es, la detección de la mirada; podrían hasta decirle a las empresas qué es lo que está captando nuestra atención en una vitrina, o nuestros sentimientos respecto a ciertos productos.

Walmart quiere ser el líder

Una fuerte señal de que el comercio minorista, cada vez cambia su forma de operar, es que Walmart, se encuentra invirtiendo en blockchain para poder rastrear a proveedores de comida.

Además, también ha patentado la tecnología para “espiar” a los compradores en las tiendas.